“Gestión integral de residuos sólidos y reforestación ante el cambio climático”, fue el taller de capacitación en el que participaron 86 productores y productoras de las Escuelas del Productor, que impulsa la Prefectura de Manabí, una jornada donde se unió la sabiduría del hombre productor con el conocimiento técnico,.
Esta actividad fue desarrollada a través de la Dirección de Ambiente y Riesgos y la Dirección de Fomento Productivo, que trabajan por hacer de la producción agropecuaria una actividad más amigable con el ambiente.
Entre los 86 asistentes participaron 52 mujeres y 34 hombres, de las Escuelas del Productor: Mujeres agricultoras semillas del futuro de Palestina; Juventud cacaotera del recinto La Curía, y Agrocacao sostenible de Pedro Pablo Gómez.
Los participantes escucharon, aprendieron y compartieron experiencias que nacen desde el corazón del campo, quienes recibieron de la Prefectura de Manabí una planta de Jamaica, como un símbolo de esperanza y compromiso con la reforestación de la provincia.
Los productores participantes en esta capacitación se comprometieron a iniciar una campaña para recolectar envases vacíos de agroquímicos; emprender una campaña de acopio de pilas usadas; y sembrar las plantas recIbidas; además de adoptar hábitos que protejan nuestro entorno.
El encuentro se realizó en Gobierno Parroquial de Pedro Pablo Gómez, y estuvo como expositor el ing David Gorozabel, técnico de la Dirección de Ambiente y Riesgos; y se contó con la participación de la Ing. Carmen Gavilanez, coordinadora del Proyecto Escuela del Productor; y de la Ing. Alexandra Miranda, vicepresidenta del GAD parroquial, quienes inspiraron con su ejemplo a cuidar la tierra como el mayor patrimonio de nuestra gente.
Cuidar el ambiente no es tarea de unos pocos, sino un acto colectivo de amor por nuestra tierra, por el agua, por el aire y por quienes vendrán después de nosotros, dijo el técnico Gorozabel.
Con actividades como esta capacitación, la Prefectura de Manabí reafirma su compromiso de seguir desarrollando programas y proyectos que ayuden a impulsar el desarrollo sostenible y el fortalecimiento de las comunidades rurales, que día a día cultivan no solo alimentos, sino también esperanza y vida.